Granito

En singular, pero no debería ser en diminutivo. Está siempre ahí, pero ese verano creció DESCOMUNALMENTE, hasta ocupar la mitad de mi labio. Labio vaginal, me refiero. Eventualmente reventó en colores varios y me dejó en paz por un tiempo. Desde entonces que me digo, siempre que lo veo, que tengo que ir al ginecólogo.

No hay comentarios: